A lo largo de este artículo te explicaremos como analizar tus plantas para conocer si estás se encuentran realmente sanas. Además, te mostraremos algunos consejos para que cuides de tus plantas y estás luzcan siempre sanas.

¿Cómo puedo saber que mis plantas están sanas?

Las hojas y las raíces de tu planta son indicadores importantes para determinar si tu planta está sana. Por lo tanto, es importante que le dediques algo de tiempo y coloques la maceta a la luz y revises ambas partes de las hojas, sin olvidar el tallo. El color de una planta revela mucha información acerca de su salud. Por lo general, cuanto más brillante e intenso sea el tono, más saludable estará la planta

1. Revisa el estado de las hojas

En este punto hay que fijarse en la forma y en el color de las hojas. Por lo tanto, hay que tener en cuenta que las hojas sanas no se decoloran y tampoco se curvan hacia abajo, ni se enroscan. Todo esto puede deberse al exceso o a la falta de riego:

Si las hojas son más pequeñas de lo normal y además están marchitas, dobladas, de un color gris verdoso opaco y se caen, es un síntoma de que la planta no está recibiendo suficiente agua.

– En el caso contrario, si las hojas están marchitas y amarillentas, es un signo de riego excesivo (y también de deficiencia de nitrógeno). 

2. Comprueba que las raíces sean fuertes

Las raíces son difíciles de ver cuando una planta está en una maceta, pero puedes saber si la planta tiene buenas raíces de manera simple, por ejemplo, levantando la planta y observando el orificio de drenaje:

– Si estás se han vuelto marrones o desprenden mal olor, suele deberse a que la planta ha sido regada excesivamente

– Por otro lado, si ves raíces que crecen a través de los agujeros, es probable que la planta haya estado en esa maceta demasiado tiempo y necesita ser trasplantada a un macetero más grande.

3. Fíjate si la planta crece

Que la planta crezca es el mejor indicador de que está sana y que se desarrolla con normalidad. Sin embargo, deberás evitar que esta crezca de forma desigual, algo muy habitual en plantas que se encuentran en el interior, ya que estás crecen buscando la luz. Por lo que es recomendable guiarla o podarla cuando estimes oportuno, pero siempre en los meses del año más adecuados para esta tarea.

crecimiento de las plantas

4. Observa si hay plagas e insectos

Revisa periódicamente que tu planta este libre de insectos y plagas. Las zonas descoloridas o los agujeros en las hojas, suelen estar causados por las larvas de polillas u otros insectos. Si encuentras una sustancia pegajosa y brillante, puede ser excrementos de pulgón. 

Para más información, sobre este tema, puedes echarle un ojo a nuestro artículo dedicado a las plagas y sus tratamientos.


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